Acapulco.- Familiares que buscan a sus hombres de mar desaparecidos, tras el paso del huracán "Otis" en el puerto de Acapulco, se manifestaron en la glorieta de la Diana Cazadora, en la Costera Miguel Alemán, para solicitar la búsqueda de capitanes y marineros que desde hace seis días no aparecen.

Se trata de hombres de mar que, como era costumbre, se quedaron a cuidar sus embarcaciones ante el huracán, del que nunca imaginaron sus efectos catastróficos.

Tal es el caso de Leonardo Leiro y Marco Cipriano, tripulantes del barco "Torbillón", que juntos sufrieron los embates del meteoro y no se sabe nada de ellos hasta al momento.

Tampoco se tiene información del capitán de la embarcación "Tiger", Pedro Espinosa García, quien estaba en la Bahía de Acapulco donde siempre se resguardaba cuando había una tormenta.

"Otis" los sorprendió cuando cuidaban sus embarcaciones

Al momento del ciclón estaban alrededor de 40 embarcaciones, con entre uno y tres tripulantes a bordo, y solo han sido encontrados vivos 18; del resto no sabe si están entre los cuerpos encontrados en la Bahía, que suman decenas, según reportes de las autoridades.

Lee también La tragedia que vive el otro Acapulco, por León Krauze

¿Los hombres de mar fueron los más afectados por "Otis"?, se le preguntó a Anabel Espinosa García, hermana de Pedro.

“Sin dudarlo. Son los más afectados en cuestión de vidas humanas. En casas (el huracán) derribó techos, pérdidas materiales, pero lo material se recupera y la vida de una persona no”, dijo.

"¿Los hombres de mar viven una tragedia en este momento?", se cuestionó.

“En este momento somos los más afectados y lo puedo asegurar y no nada más porque sea mi hermano, hay muchísimos.

"Si se van por la Costera, en el Zócalo hay familiares esperando, en el Club de Yates hay familiares esperando, en la Marina Acapulco hay familiares, en el Servicio Médico Forense van, en todos lados”, expresó.

“Es algo inmenso, no sabemos si el gobierno se está dando cuenta de la magnitud”, declaró la hermana de Pedro.

Acompañada de su cuñada, Anabel Espinosa pidió el apoyo de un helicóptero para que vayan mar adentro, con las coordenadas exactas para buscar a las personas desaparecidas.

"Ellos y nadie se imaginaba la magnitud", puntualizó.